jueves, 18 de junio de 2009

Mi hijo no va al instituto

Estimados lectores y lectoras:

Hoy quiero hablar de un problema cada vez más patente en nuestra sociedad al que tarde o temprano habrá que darle una solución:

Cada vez es más frecuente que nuestros adolescentes de 14 y 15 años, que cada vez son más altos y fuertes, y que muchos de ellos pasarían por chicos o chicas de 17, decidan firmemente, que no van al instituto ya que no tienen ningún objetivo en la vida.

Para el que no lo sepa, cuando eso ocurre, se pone en marcha una interminable cadena, cuyo primer eslabón consiste en que el adolescente comienza a faltar a clase y a mentir a sus padres, cosa que dura poco tiempo ya que enseguida estos son informados por el instituto mediante llamadas, mensajes, y cartas.

Entonces, los padres, durante unos meses consiguen llevar al adolescente a clase; este, que considera que tiene la madurez suficiente para decidir, ya lo ha hecho, y para que se cumpla su objetivo, incordia a profesores y compañeros hasta que consigue ser expulsado, primero tres dias, y finalmente un mes.

Durante este tiempo, hay padres que enseñan a sus hijos el trabajo duro, en cambio hay otros padres que no tienen esa suerte, y lo único que consiguen es tener a su hijo en casa durmiendo hasta las 12.

En ningún caso, el chico/a cambia de opinión, ya que ha descubierto que fuera se está mejor que dentro, sin importarle, que, en muchos casos, la guardia civil o los servicios sociales visiten a sus padres con motivo de su absentismo.

LLegados a este punto, muchos padres, han llegado a tenerle miedo a ese "hombre" o "mujer" de 14 años que tienen en casa, y no saben qué hacer.

Por desgracia, no tengo solución para este problema, aunque sí el inmenso deseo de que la ley ampare a estos padres y permita a estos chicos/as sin objetivos, aprender un oficio que les haga personas dignas en lugar de tomar rápidamente el camino de las malas compañias, el tabaco, el alcohol...

Queridos padres y madres, les deseo mucha paciencia y mucha suerte e invito a todos aquellos/as que lo deseen, a compartir sus experiencias y/o consejos acerca de este tema, ya que puede ser una guia fundamental para muchos padres que se encuentran solos con este problema.

Un saludo

viernes, 5 de junio de 2009

RESPUESTA A Mª CARMEN

Mª Carmen: Hago visitas a domicilio siempre que la persona lo pide. Esta es una de las razones por las que es necesario pedir cita previamente. La cita la puedes pedir por medio del blog,esta dirección ya la sabes: http://lapsicologiaanuestroalcance.blogspot.com
El correo electronico: mcalvo4@hotmail.es
El tf: 653 223 499
PUEDES AVISARME SIEMPRE QUE LO NECESITES, Y ASÍ ACORDAMOS EL DIA Y LA HORA, ¿VALE?

OJOS

ÍTACA

Si vas a emprender el viaje hacia Ítaca,
pide que tu camino sea largo,
rico en experiencias, en conocimiento.
A Lestrigones y a Cíclopes,
o al airado Poseidón nunca temas,
no hallarás tales seres en tu ruta
si alto es tu pensamiento y limpia
la emoción de tu espíritu y tu cuerpo.
A Lestrigones ni a Cíclopes,
ni al fiero Poseidón hallarás nunca,
si no los llevas dentro de tu alma,
si no es tu alma quien ante ti los pone.

Pide que tu camino sea largo.
Que numerosas sean las mañanas de verano
en que con placer, felizmente
arribes a bahías nunca vistas;
detente en los emporios de Fenicia
y adquiere hermosas mercancías,
madreperla y coral, y ámbar, y ébano,
perfumes deliciosos y diversos,
cuando puedas invierte en voluptuosos y delicados perfumes;
visita muchas ciudades de Egipto
y con avidez aprende de sus sabios.

Ten siempre a Ítaca en la memoria.
Llegar allí es tu meta.
Mas no apresures el viaje.

Mejor que se extienda largos años;
y en tu vejez arribes a la isla
con cuanto hayas ganado en el camino,
sin esperar que Ítaca te enriquezca.

Ítaca te regaló un hermoso viaje.
Sin ella el camino no hubieras emprendido.
Mas ninguna otra cosa puede darte.

Aunque pobre la encuentres, no te engañará Ítaca.
Rico en saber y en vida, como has vuelto,
comprendés ya que significan las Ítacas.


Costantino Kavafis


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